Evolución del fútbol durante el verano

Llorente, Pellegrino y Braulio Vázquez. EFE

No hace ni una semana que ha terminado la Eurocopa y ya estamos inmersos de lleno en otro asunto de actualidad: el mercado de fichajes. Y cambiamos el hablar de partidos, tácticas, jugadores y goles por otros términos como fichajes, traspasos, millones de euros, altas y bajas, pretemporada… Con todo, lo que más me llama la atención es que, de un modo u otro, la realidad es que nunca se deja de hablar de fútbol.

Recuerdo cuando era niño (finales de los 80 y principios de los 90) que cuando terminaba una Liga no se hablaba apenas de fútbol hasta que empezaba la siguiente, salvo que hubiera Eurocopa o Mundial. Y siempre cuando finalizaban estas competiciones el fútbol casi ‘desaparecía’, salvo para informar de fichajes importantes ya realizados y algunos torneos y partidos de pretemporada. El mes de julio era como si fuera inhábil futbolísticamente, a pesar de la existencia de diarios como ‘Marca’ o ‘As’.

Todo ello empezó a cambiar a mediados de los 90, entre otras cosas cuando las cadenas de televisión (todas, sin excepción), decidieron apostar por el ‘fútbol de verano’ para no perder demasiada audiencia. ¿Recordáis cuando todos los días televisaban un partido como mínimo de torneos de los que (casi) nunca habíamos oído hablar? También en esa época fue cuando las negociaciones de fichajes empezaron a tener seguimiento masivo por parte de los aficionados.

En la actualidad, el fútbol siempre está presente en los medios de comunicación y en la sociedad, da igual que no haya competición. Ha calado tanto en la sociedad que ya es un elemento más de ella. Y reconozco que eso también tiene elementos negativos.

Un pensamiento en “Evolución del fútbol durante el verano

  1. El fútbol tiene mayor repercusión porque la sociedad ha evolucionado. Comparto contigo el hecho de que eso no es necesariamente bueno

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